
Cómo limpiar el aire acondicionado para tenerlo en perfectas condiciones
El aire acondicionado es probablemente uno de esos aparatos que te salva la vida en verano y también en invierno si tiene incluida la función de estufa, pero al que no le prestas mucha atención a la hora de limpiar.
No basta con pasarle un paño húmedo o el plumero por encima para quitarle el polvo, sino que requiere un mantenimiento específico para que funcione de manera adecuada y tarde más en estropearse.
El no limpiarlo con frecuencia, podría traer malos olores y humedad a tu casa, al acumularse la suciedad en su interior, además de ocasionar averías que podrían salirte muy caras.
El nivel de gas refrigerante, los filtros, la protección en tiempos de parada prolongada y la batería de la unidad exterior son las 4 partes básicas de tu aire acondicionado que necesitan un mantenimiento.
Lo ideal es que los revises con el cambio de temporada, principalmente antes de verano y de invierno, puesto que son las épocas donde más uso le vas a dar.
Es importante mencionar que, si no estás seguro de poder seguir el proceso bien, es mejor que acudas a un profesional, pues hará el trabajo de forma correcta sin dañar el aparato.
Limpiar los filtros y la parte interior
Antes que nada, apaga y asegúrate de que el aire acondicionado no está conectado a la corriente para evitar descargas.
La parte interior del aparato se limpia fácilmente con agua y jabón, pero los filtros requieren mayor cuidado. Para deshacerte del polvo y las pelusas, quítalos y pásales la aspiradora y luego un paño de agua fría. Después, sécalos al aire, pero no al sol, pues este podría estropear y deformar el objeto.
El desagüe es otra de las partes importantes a tener en cuenta, pues ahí es donde se acumulan las bacterias, malos olores y el agua sucia. Para su perfecto funcionamiento, simplemente deshazte del agua que contenga en su interior y enjuágalo con agua limpia, al menos, una vez al mes.
Tampoco puedes olvidarte del gas refrigerante, pues una fuga o pérdida de este podría reducir en gran consideración la actividad de tu aire acondicionado.
Por ahora, según recomiendan los expertos, la revisión debe hacerla un profesional habilitado, por lo que si ves que el aparato enfría poco o algún tipo de goteo, llama a un experto.
Finalmente, limpia la parte exterior del aire, que contiene el ventilador, compresor e intercambiador con un paño con mucha delicadeza. De este modo evitarás obstrucciones de suciedad que podrían comprometer el aparato.
Además, conviene prestar atención a la salud de la batería del aire acondicionado de vez en cuando, pues como todos los aparatos eléctricos, tienen a fallar después de un tiempo.
Fuente: businessinsider.es